Úrsula Corberó, actriz
“EN TUDELA SE COME DE MARAVILLA”
Úrsula Corberó formó parte del jurado del XVI Festival de Cine Ópera Prima de Tudela. A los 13 años ya intervino en una serie de televisión (TV3), pero la fama le llegó en 2008 en su papel de Ruth en “Física o química”. A partir de entonces ha participado en teatro (“Perversiones sexuales en Chicago”), en películas (“XP3D”, “Crimen con vistas al mar”, “¿Quién mató a Bambi?”, “Perdiendo el norte”, “Cómo sobrevivir a una despedida” y “La Corona Perdida”; y en series de televisión (“Isabel”, “La dama velada” o “Anclados”).
– ¿Cómo has visto la ciudad?
– “He estado muy bien en Tudela, ciudad donde no había estado nunca. Y me han cuidado muy bien”.
– Y donde se come de maravilla.
– “¡Ostras!… No comía así desde el verano. Una verdurita muy rica, unos pimientos del cristal buenísimos… Todo. Fuimos a cenar a un sitio espectacular y salimos rodando casi…”.
– ¿Qué opinas de los tudelanos?
– “Cuando estuvimos en el cine presentándonos como jurado me sorprendió la tranquilidad y la respetuosidad de la gente, que es un punto que juega a su favor”.
– Eres una mujer polifacética: cantas, bailas e interpretas.
– “Yo lo hago todo. Es que yo quería ser artista. Me encanta el baile, el canto y la interpretación. Pero sí que es verdad que siempre me he sentido más cómoda interpretando. El canto y el baile lo tengo como algo más mío, más íntimo”.
– ¿Cuándo te diste cuenta de que querías ser actriz?
– “Exactamente de cine cuando hice mi primera serie que fue a nivel autonómico, en TV3, “Mirall trencat” (Espejo roto) con 13 años. Allí me di cuenta de que lo mío era ser actriz”.
– ¿Cómo llevas la fama?
– “Ha sido algo como muy peldaño a peldaño. “Física o química” fue un boom, y quizá donde más lo noté. Pero yo ya había participado en “Vendelplà”, una serie de TV3 super conocida, y ya estaba semi acostumbrada a que la gente me parara por la calle y me pidiera fotos.
Tengo, en general, un punto de inconsciencia que hace que en ese sentido viva más tranquila. Tampoco le doy muchas vueltas si me piden una foto o me miran. Mucha gente me dice: ‘te está mirando todo el mundo’; y yo me sorprendo porque no me doy cuenta.
Tal vez porque no puedes hacer tu vida y estar pendiente por la calle de quién te está mirando. Eso sería un sin vivir”.
– ¿Cómo te encontraste en ‘Cómo sobrevivir a una despedida’?
– “Es una comedia dirigida por Manuela Moreno. Nosotros lo describíamos como un ‘Resacón en las Vegas’, pero de tías y a la española, que es mucho más apetecible.
Estuve rodando casi dos meses en Canarias y se estrenó hace poco. La verdad es que me lo pasé genial. Normalmente a mí me toca siempre hacer de pija y no sé porqué. No me considero una niña pija, sino todo lo contrario. Yo creo que cuando estoy en confianza soy un poco bruta. Me hacía mucha ilusión este personaje porque era todo lo contrario. Era una chica super desinhibida, explosiva, que utiliza a los hombres como le da la gana, un tanto perdida…
Tenía como muchas cosas muy masculinas y a la vez era muy femenina y muy sexy. Me cortaron el pelo, me lo pusieron de león y disfruté. ¡Uf! Estaba en mi salsa y bailaba. Fue muy guay”.
– Tu última película ha sido “La Corona partida”.
– “Sí. Es con Diagonal TV, la misma productora de la serie ‘Isabel’. Diríamos que es lo que sucede entre la última temporada de ‘Isabel’, cuando termina, y antes de que empiece ‘Carlos, rey emperador’”.
– ¿Cómo te has encontrado en la serie ‘Isabel’ donde interpretaste a Margarita de Austria?
– “Ha sido un viaje. Ha sido impresionante, no solamente por el personaje y por la compañía de los actores y la profesionalidad que hay ahí dentro en cuanto a vestuario y todo, sino porque realmente sufres una transformación.
Es imposible que te interpretes a tí mismo. Te olvidas totalmente y creo que eso juega muchísimo a favor de los actores. Todo ese cambio de vestuario, de peluquería, ese pelazo que me ponían tan largo, esos tocados y esas joyas ya te hacen estar en otra onda. Coges otra actitud. Es impresionante.
Y luego tenía todo con Raúl Mérida, con Irene Escolar, que me parecen unos actores como la copa de un pino y he disfrutado muchísimo.
También es verdad que mi personaje no tenía mucho desarrollo a lo largo de la temporada. Me hubiera gustado exprimirlo y disfrutarlo un poco más, así como trabajarlo más a fondo”
– Cambiando de tema. También has abierto tu propia tienda de ropa ‘Ursu Lolita’.
– “La monté hace dos años en Madrid, en el Barrio de Salamanca, en la calle Claudio Coello 81. Allí está mi madre de encargada, por lo que si vais os va a tratar estupendamente. Doy fe.
Fue una de estas cosas que me dan a mí. Pasé por delante de la calle, vi un local que estaba en alquiler y tuve una corazonada. Dije: ‘yo tengo que montar algo aquí, y no quiero socios, lo monto todo yo’.
Se me ocurrió eso hace casi tres años, que estábamos en plena crisis, crisis total. Estaba todo el mundo desesperado y a mí no se me ocurre otra cosa que montar una tienda.
La verdad es que no me puedo quejar. Cada vez tenemos más clientela fija. Ahora estamos en proceso con la página web. Internet actualmente es lo que más tira.
A mí también me va bien porque tengo otras cosas en la cabeza. Yo hago la selección de toda la ropa, complementos, botas, zapatos, cinturones y sobre todo muchos bolsos.
Va dirigida a la mujer que le gusta ir cómoda y guapa, con precios que abarcan un poco de todo. Está hecha para una mujer que le gusta ir a la moda, pero también cómoda”.
– ¿Te gusta la moda?
– “Me encanta”.
– ¿Siempre sales de casa muy arreglada?
– “No” (Nos enseña sus botas y pantalón vaquero, que según ella son muy corrientes)
– Pero si tienes que ir a un evento importante sí.
– “Claro. Me gusta dedicarle tiempo simplemente porque lo disfruto. Yo sé que forma parte de mi trabajo dar una buena imagen, pero si no lo disfrutara no lo haría. Es por eso que cada vez voy a menos eventos.
Parece que no, pero todo lo previo es un desgaste de energía. Sobre todo para las chicas, porque tienes que buscarte un look, maquíllate antes, péinate… Y siempre intentando buscar el equilibrio de lo que le va a gustar a la gente y lo que te gusta a ti, evidentemente. Que tú te sientas cómoda y que la gente diga: mira que mona va”.
