Situados en Balsa del Pulguer, Soto de los Tetones, Soto de Azagra y Playa-Soto de Buñuel
La consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez, participó en la presentación de los nuevos observatorios ornitológicos de la Ribera, que tuvo lugar en uno de ellos, el ubicado en la balsa del Pulguer. Le acompañaron el gerente del Consorcio EDER, Abel Casado, el gerente de Cederna-Garalur, Ibon Mimentza, la alcaldesa de Buñuel, María Teresa Espinosa, el alcalde de Cascante, Alberto Añón, y la concejal de festejos de Tudela, Verónica Gormedino.
Las instalaciones permiten acceder a cuatro de los mejores paraísos naturales del Sur de Navarra, respetándolos y sin molestar a las aves. Se trata de tres espacios ubicados junto al río Ebro: el soto de Azagra, aguas debajo de la barca, el soto de los Tetones en Tudela, y la playa-soto de Buñuel, al sur de su casco urbano. El cuarto es la reserva natural de la balsa del Pulguer, entre Cascante y Tudela.
La carencia de instalaciones adecuadas para la observación ornitológica en la Ribera, en contraste con la disponibilidad en la zona de la Montaña, ha dado lugar a que el proyecto ‘Bird watching Montaña y Ribera Navarra’ incorpore para dicho territorio la construcción de observatorios, equipados con paneles informativos para el acceso y la interpretación, aparcamientos y señalización de acceso.
El proyecto ‘birdwatching’ está financiado desde el Programa de Desarrollo Rural de Navarra, con fondos FEADER de la UE (65%) y Gobierno foral (35%), y su coste es de 138.644 euros que corresponden en su mayor parte (el 90%) al gasto realizado en la Ribera. La gestión ha sido realizada por el equipo técnico del Consorcio EDER.
Las instalaciones de Azagra se hallan situadas en el alto de Campiel, y cuentan con una torre de observación desde la que se domina todo el espacio natural ‘a vista de pájaro’, con acceso controlado. Los observatorios de los Tetones y Buñuel, ubicados en el primer caso tras la antigua fábrica de la Ebroquímica, y en el segundo al este del caso urbano, disponen de casetas de camuflaje abiertas, de acceso libre, situadas en puntos de observación fuera de los espacios naturales. El último observatorio, con dotaciones similares, se ha situado en la reserva natural de la balsa del Pulguer, entre Cascante y Tudela, que cuenta además con un itinerario señalizado y protegido alrededor de la balsa.
Además de la torre y casetas de observación, se ha dotado cada zona con aparcamiento para coches y bicicletas, señalización de acceso, y paneles informativos del área de visita e interpretativos con explicaciones sobre las aves que pueden observarse desde allí.